Podremos optar por realizar las rutas señalizadas por el término municipal. Cinco rutas que nos acercarán a numerosos y bellos rincones de este municipio más allá de su casco urbano.
Se han elegido caminos con fácil accesibilidad en casi todos sus tramos, con buenos firmes y escasa dificultad técnica, posibilitando así la realización para todo tipo de público. Escanea antes de partir los códigos QR que encontrarás en las señales de inicio de ruta para conocer con más detalle qué te deparará la ruta que estás a punto de comenzar.

 

La ruta accesible y autoguiada por el término municipal de Lumbrales nos acerca a numerosos y bellos rincones de este municipio más allá de su casco urbano. Cinco rutas señalizadas y conectadas entre sí casi todas ellas para que el visitante decida qué longitud total desea recorrer uniendo unas con otras.

 

   
 
 
 

- Aunque la mayoría de los caminos son accesibles, algunos
  tramos tienen problemas de accesibilidad, especialmente
  en época de lluvias.

- Sigue el camino establecido y respeta todas las señales
  de tráfico.

- Usa siempre el casco y no utilices auriculares.

- Adapta la velocidad de la bicicleta a las condiciones
  del camino y a la visibilidad

   
 
 
 
 
   
 

Este camino nos conducirá hasta el puente de hierro por el que pasaba el ferrocarril que unía el oeste salmantino con Portugal. A lo largo de la senda, que discurre entre prados y tierras de labor, encontraremos abrevaderos, charcas y otros elementos destacados.

La ruta nos hará pasar junto a los terrenos donde, hasta no hace muchos años, se trillaba, o junto a la Dehesa, finca municipal de más de 600 hectáreas que son aprovechadas por los vecinos de la localidad.

Asimismo, encontraremos especies botánicas de interés, como el torvisco, que se empleaba tradicionalmente para desparasitar el ganado, o los olmos o negrillos, especie muy abundante en el pasado que fue diezmada por la grafiosis, una enfermedad que es producida por un hongo.

 

   
       
   
 

Gracias a esta travesía viajaremos hasta la Prehistoria, descubriendo un dolmen del segundo milenio antes de Cristo o llegando hasta las proximidades de un castro vetón.

El dolmen es un monumento funerario que constaba de un pasillo y una cámara sepulcral. Por desgracia, solamente han llegado hasta nuestros días cuatro de las siete piedras hincadas que conformaban la cámara.

Por su parte, el castro de las Merchanas es la joya de la localidad, y sin duda merece la pena que lo descubramos con calma en una futura visita.

Además, pasaremos al lado de una antigua mina de estaño subterránea que se comenzó a explotar en el siglo XIX. Partes del recorrido presentan firmes con problemas de accesibilidad, especialmente en las épocas de lluvia.

   
       
   
 

A lo largo de este recorrido podremos contemplar interesantes elementos etnográficos como las fuentes de piedra de Valdeperijo o el “Prao del Toro”. Asimismo, descubriremos pintorescos paisajes y formaciones naturales, como el Lombo de los Rollos o el Teso de la Cornocosa.

Esta ruta toma el nombre de una pequeña elevación dominada por dos bolos de granito de grandes dimensiones que los lugareños denominan “La Rueca” y “El Huso”.

Este recorrido aprovecha en un gran trecho el Camino de los Jarales, tradicional vía de comunicación que unía Lumbrales con la vecina localidad de Bermellar. Esta senda cruza con el Camino de los Arrieros o de los Taberneros, que al parecer provenía desde Béjar cruzando toda la provincia, y se empleaba para el contrabando.

 

   
       
   
 

El agua será nuestra acompañante en un sendero que nos llevará junto a la Charca del Valle Ancho, la Fuente Lera, o el Arroyo del Pinar. La abundancia de este elemento favorece la existencia de cultivos y pastos a lo largo del recorrido.

Del mismo modo, la gran cantidad de agua nos permitirá disfrutar de especies vegetales típicas del bosque de ribera, como chopos, fresnos, sauces y mimbreras.

Pero, además, en esta ruta podremos encontrar elementos de gran valor etnográfico, como una choza tradicional construida en piedra seca, es decir, sin usar morteros ni argamasas. Normalmente, este tipo de construcciones eran usadas para proporcionar refugio a personas y animales. Junto a esta choza descubriremos un abrevadero con varios pilones en los que bebe el ganado.

   
       
   
 

Partiendo de una magnífica fresneda, ascenderemos ligeramente entre viñedos y cultivos que irán dando paso a arbustos, robles y encinas. Así, llegaremos hasta a la ermita de San Gregorio y su área recreativa, donde podremos reponer fuerzas y disfrutar de buenas vistas panorámicas.

En la ermita de San Gregorio se encuentra la imagen del santo, y cada 9 de mayo, día de su festividad, los habitantes de Lumbrales suben hasta allí para honrarlo y hacer una merienda.

El camino nos permitirá contemplar ejemplares centenarios de pino resinero, que destacan por su enorme porte, al igual que un eucalipto que veremos sobresalir entre toda la vegetación. Asimismo, atravesaremos tierras abandonadas que hasta hace poco acogían el cultivo de diversos frutales como nogales, ciruelos, melocotoneros, perales o membrilleros.